Un espíritu con visión de futuro podría saber dónde se está estableciendo el nuevo Imán para las futuras construcciones. Las energías cósmicas se están aunando para fijar las bases del Fuego. Escuchen atentamente el aproximarse del Mundo del Fuego. [1]
En el 2025, un año de grandes convergencias, se magnetizarán y orientarán las construcciones futuras, que deben ser planificadas y organizadas conscientemente, teniendo en cuenta las cualidades del Futuro, que pueden resumirse del siguiente modo:
- El futuro es un poder supremo que conduce a un propósito definitivo y prefijado de gloria indescriptible.
- El futuro solar no tiene límites. Surge del centro del Sistema Solar y cultiva su Espacio.
- El futuro es un Plan de desarrollo cíclico, que está compuesto por una miríada de ciclos menores, y que a su vez forma parte de ciclos mayores.
- El futuro, y no el presente, es el verdadero centro de la atención y actividad humanas. Y predispone simetrías variables de acontecimientos y cualidades.
- El futuro es la libertad creadora ofrecida a todas las criaturas; y cada una de ellas puede construir la suya, moldeándola según el libre albedrío.
- El futuro está conectado al pasado, que condiciona sus formas. Juntos, el pasado y el futuro son la comunión de los desarrollos evolutivos.
- El futuro es un orden orgánico, jerárquico y vivo.
El ímpetu del hombre hacia el futuro puede cambiar toda condición terrenal.
Es extraordinario pensar en el poder regenerador de un hombre que está orientado, por el entusiasmo, hacia el futuro. Para lograr el poder de cambiar cualquier condición terrenal, es necesario confiar el gobierno interior a la voluntad ardiente; aprender a utilizar de manera creadora todas las claves y atraer las energías del Espacio; situar la regeneración del pensamiento en la base de toda obra y construir un futuro en consonancia con el Plan concebido por las Inteligencias celestes. La clave astrosófica sugiere elevar la mirada al Cielo y dirigir la Construcción del Futuro hacia las fechas que provocan los movimientos evolutivos del planeta y de sus criaturas.
La conciencia proyectada hacia los Mundos superiores puede hacer uso de los tesoros del Cosmos. Atraer las energías del Espacio es la base del poder creador.
El hombre es una fuente de conocimiento, el mayor transformador de las fuerzas cósmicas. [2]
Para superar la actual crisis mundial.
Para superar la actual crisis mundial, la Enseñanza subraya la necesidad de desarrollar una Nueva Cultura y una Nueva Civilización y un esfuerzo unido de todas las personas que creen en el poder del pensamiento. La acción común se convierte en una poderosa fuerza motriz cuando se actúa de forma ordenada y en consonancia con el Gobierno real.
En La Exteriorización de la Jerarquía, A. A. Bailey, leemos:
«Hoy todo el problema mundial ha entrado crisis y su solución será el tema sobresaliente de cualquier proceso —educativo, religioso y económico— hasta el año 2025.»
«Así, se está produciendo un nuevo gran movimiento y una influencia y acción recíprocas enormemente incrementadas. Esto continuará hasta el año 2025 d. C. [esto fue escrito en los años entre 1940 y 1950]. En los años que transcurran desde ahora y hasta entonces, grandes cambios se producirán y en la gran Asamblea General de la Jerarquía (celebrada comúnmente cada siglo) en el año 2025, se establecerá con toda probabilidad la fecha para la primera etapa de la exteriorización de la Jerarquía. El ciclo actual (de ahora a entonces) se lo llama técnicamente la “Etapa del Precursor”. Es de naturaleza preparatoria, de prueba en sus métodos y destinada a revelar sus técnicas y resultados. Por lo tanto, como podrán ver, los Chohanes, Maestros, iniciados, discípulos mundiales, discípulos y aspirantes afiliados a la Jerarquía, pasan en este momento por un ciclo de gran actividad.» [3]
La Jerarquía es descrita como: «(…) un gran cuerpo de salvación compuesto por Unidades de Vida, dedicadas y liberadas, que trabajan, en formación grupal, con todas las formas y vidas de todos los reinos y particularmente con todas las almas. Cuando la Jerarquía actúa así, pone exclusivamente el énfasis sobre el aspecto conciencia de todas las formas. Su actual agente de salvación y de servicio es la mente, cuando se expresa por intermedio de la mente de los seres humanos, los aspirantes, discípulos (de todos los rayos y grados) y todos los iniciados; la Jerarquía también puede expresarse por medio de las corrientes de pensamiento y de ideas.» [4]
«Cuando la Voluntad de Dios, expresada por Shamballa y enfocada por el Buddha, cuando el Amor de Dios, expresado por la Jerarquía y enfocado a través del Cristo, y cuando el deseo inteligente de la humanidad, enfocado a través de los discípulos y aspirantes del mundo y los hombres de buena voluntad, estén sintonizados consciente o inconscientemente, entonces puede tener lugar, y tendrá, una gran reorientación. Esto es algo que puede suceder. (…) Se necesitan, pues, conocedores y hombres cuyas mente y corazón estén abiertos; que estén libres de ideas preconcebidas y de los viejos idealismos, que deben ser reconocidos solo como indicaciones parciales de grandes verdades no realizadas.» [5]
En la luz del nuevo alineamiento entre los tres centros principales del cuerpo planetario de manifestación del Logos —Shamballa, la Jerarquía y la Humanidad—, un gran grupo de Servidores del Bien, de la Belleza y de la Verdad, cuyas vidas están orientadas por la responsabilidad y el servicio, están respondiendo al llamamiento. Impulsados por el Amor, la Sabiduría especial encarnada por Cristo en Su primer advenimiento, se alinean con las Inteligencias del Cielo, avanzando de forma concertada para ocupar un lugar en la evolución de los ciclos planetarios y establecer una relación cada vez más estrecha con la Jerarquía. «El Cristo, Jefe de la Jerarquía, trabaja para todos los hombres, independientemente de su fe; no pertenece más al mundo cristiano que al budista o al mahometano o a cualquier otro. Nadie tiene que afiliarse necesariamente a la iglesia cristiana para estar unido al Cristo. Lo que se requiere es amar al prójimo, llevar una vida disciplinada, reconocer la divinidad en todos los credos y en todos los seres, y regir su vida cotidiana con Amor.» [6]
«En el Camino infinito de la Bienaventuranza (…), gracias al impulso de la vida misma, el progreso siempre continúa; el conocimiento siempre debe ser transmutado en sabiduría; el amor debe ir siempre acompañado de la voluntad divina; los planes deben ceder siempre al propósito divino; a la luz debe ser reemplazada por la vida.»
«(…) lo que se adquiere por experiencia, persiste siempre y nada se pierde; lo que la vida en la forma ha conferido, sigue estando en posesión de la entidad espiritual inmortal; lo que la conciencia del alma ha abarcado e incluido, sigue siendo el rico don del Ser, centrado ahora en la mónada; (…). La humanidad está preparada para crear un mundo nuevo y mejor, más adecuado a su “renovada” naturaleza espiritual (…). Con las técnicas de la nueva civilización (…), la humanidad avanzará bajo una nueva luz. Como síntesis y como percepción omnincluyente de la Gran Vida que abarca todo lo que es, todo (excepto lo que conocemos como mal) persiste y dura eternamente.»
«El hecho de que la Jerarquía esté aproximándose más a la humanidad y haga oportunamente Su aparición en el plano físico, no solo se debe a la intención jerárquica, sino también a la demanda del género humano y a la fuerte vibración y nota que la humanidad ha establecido.»
«Los tiempos están maduros (…), la humanidad está lista para crear un mundo nuevo y mejor, más adecuado a su naturaleza espiritual “renovada” (…) con las técnicas de la nueva civilización (…) la humanidad avanzará bajo una nueva luz (…). Esto es, por lo tanto, el más maravilloso de la historia de la humanidad.» [7]
«El nuevo grupo de servidores del mundo está destinado a ejercer un poder extraído de dos fuentes: del centro interior, o gobierno subjetivo del mundo, cuyos miembros han difundido las ideas y los ideales que han guiado el progreso de la humanidad en todas las épocas. A ello, que siempre ha existido, han estado siempre estrechamente asociados todos los grandes líderes de la humanidad. Los grandes idealistas y las grandes figuras (como el Cristo y su gran hermano, el Buddha, y otras menores, como Platón, Spinoza, Abraham Lincoln o Florence Nightingale) estuvieron todos asociados con ese centro. Sus legiones son inmensas, y sus grados muchos, pero todos se han distinguido por su abnegación para mejorar la existencia humana, y por su amor al prójimo. Todos ellos se inspiraron en ese punto central.» [8]
«Quienes conforman el gobierno interno del mundo, es decir, la Jerarquía planetaria, buscan facilitar la inclusión de nuevos ideales y nuevos propósitos en la conciencia humana; son características de la nueva era. (…) En última instancia, el nuevo Plano de los Grandes Seres no es más que una extensión del que siempre ha existido. La idea básica no ha cambiado. El éxito del presente esfuerzo depende de la disponibilidad de las fuerzas dispuestas a favor de la rectitud progresiva y de la capacidad de los discípulos para actuar al unísono e influir en la opinión pública de modo que en todo el mundo se produzca un gran cambio en las actitudes humanas. Los miembros del Nuevo Grupo de Servidores del Mundo no deben disipar sus esfuerzos.» [9]
Estas palabras son alentadoras e invitan a las conciencias humanas a avanzar a sabiendas hacia la Luz del Principio de Unidad. Los verdaderos valores, basados en la Voluntad de Bien y la Hermandad, enraizados en la divinidad innata del hombre, deben moldear los Sueños, las Metas constructivas de la Nueva Era, encender la Belleza del Poder dinámico de las Ideas al servicio de la Nueva Cultura.
«Solo a través de la cultura será posible implantar la nueva Era; y así se proclamará el único baluarte contra la desintegración. Hoy deberíamos esforzarnos solo en esta dirección.» [10]
Podemos contribuir en esta dirección visualizando un hilo de amor y luz que una a toda la hueste de Servidores a la Orden Solar, que desde el mundo de las Ideas guían el progreso de la humanidad y afirman juntos el Plan de Amor y Luz. El arte de la visualización, combinado con la perseverancia y el coraje impávido dirigen la energía y conduce a la victoria.
El Prototipo del Orden Planetario, a fin de no perder las fechas y dominar el futuro, ha estructurado la Obra común causal o interior para los próximos años hasta el 2025; es una forma de pensamiento ordenada según los pasos del Plan solar y planetario, en apoyo de la exteriorización de la nueva Cultura solar. (Consultar el documento en inglés Los siete pasos hacia el 2025)
Desde el centro que llamamos la raza de los hombres,
Que se realice el Plan de Amor y Luz.
Que la Luz, el Amor y el Poder restablezcan el Plan en la Tierra.
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Nota: Este artículo se publica en correspondencia con los fuegos solares del 3.er y 5.o Rayos: Saturno, el Pensador y Sembrador por excelencia, y Venus, la Mente iluminada por el Amor. Este impulso causal que nos orienta a preparar y construir el Futuro brilla en la Luz superna de Capricornio: “la Puerta de los Dioses”, el único punto donde los poderes solares y humanos pueden encontrarse para colaborar en los planes de desarrollo planetario. Los Signos del Cielo nos dirigen a cristalizar la Luz en formas y a establecer planes y proyectos iniciáticos, para reemplazar los que se han vuelto inadecuados y obsoletos para la evolución.
[1] Mundo del Fuego III [Mundo Ardiente III], Agni Yoga, § 140.
[2] Ídem, § 306.
[3] La Exteriorización de la Jerarquía, A. A. Bailey, pp. 315 y 453, Ed. Sirio; ingl., pp. 363 y 530.
[4] Ídem, p. 450; vers. ingl., p. 526.
[5] Ídem, pp. 314-5; vers. ingl. pp., 362-3.
[6] Ídem, p. 476; vers. ingl., p. 558.
[7] Ídem, pp. 477, 478, 479, 480; vers. ingl., pp. 559, 560, 561, 563.
[8] Ídem, p. 561; vers. ingl., p. 664.
[9] Ídem, p. 552 ; vers. ingl., p. 652.
[10] Mundo del Fuego III [Mundo Ardiente III], Agni Yoga, § 190.
Nota: Este artículo ha sido traducido del original en italiano; consultar aquí.